Intifada significa en árabe alzamiento, insurrección, aunque, desde la década de los 80, el término se usa para referirse a la rebelión de los palestinos contra la ocupación israelí. En Faluya, ciudad iraquí situada a unos 50 kilómetros al oeste de Bagdad, viven su particular Intifada, una rebelión que, en las formas, se parece a la palestina pero que, en el fondo, presenta diferencias. Sobre todo una: Faluya clama por el honor de sus mujeres, ya que creen que los soldados pueden verlas desnudas con sus visores nocturnos.

"ASESINOS DE EEUU"

La Intifada palestina y la de Faluya son lo mismo en cuanto a las muertes y la violencia: 18 iraquís han muerto desde el lunes por disparos de los militares de EEUU, mientras se manifestaban en contra de su presencia en la ciudad. El miércoles por la noche, siete soldados resultaron heridos cuando su base, un antiguo cuartel del partido Baaz, fue atacada con granadas, segun explicó ayer el capitán de la 82 División, Frank Rosembeltt.

"Tarde o temprano os echaremos, asesinos de EEUU"; "Nuestra libertad está en que dejéis nuestro país"; "El hombre puede ser destruido pero no derrotado", rezan varias pancartas en el ayuntamiento, situado junto al cuartel en el que están los soldados. Todo empezó cuando, el viernes, los militares entraron en la ciudad y tomaron la escuela Al Kaid, donde hay cristales rotos, pupitres amontonados y carteles de Sadam destruidos.

"No sé qué hacen los norteamericanos aquí, quiero que se vayan", afirmó ayer el tendero Abdula Jalaf. Está claro que la población de Faluya no quiere a los soldados. Pero en contra de las apariencias, no se trata de una cuestión puramente política. "Con sus visores nocturnos, los militares miran dentro de las casas y ven a las mujeres. Nuestras tradiciones no aceptan esto", explicó ayer el jefe tribal Jalaf Abed.