El regulador bancario de Australia anunció que investigará al banco Westpac, el segundo más importante del país, por presuntamente permitir transacciones vinculadas a la explotación infantil y el lavado de dinero.

La Autoridad de Regulación Prudencial Australiana (APRA, siglas en inglés), también ordenó a Westpac a duplicar su capital hasta los 1.000 millones AUD (686.800 millones USD o 616.500 millones EUR), según un comunicado del organismo fiscalizador.

FALTA DE CONTROLES

APRA se basará en la denuncia formulada el mes pasado por el Centro Australiano de Informes y Análisis de Transacciones (AUSTRAC), que acusó Westpac de violar las leyes contra el lavado de dinero y el terrorismo más de 23 millones de veces entre 2013 y 2018.

AUSTRAC considera que el banco no realizó los controles apropiados para vigilar que las transacciones de pederastas condenados en Filipinas y el Sudeste Asiático, no estuvieran relacionadas con la explotación infantil. El valor de esas operaciones asciende a más de 11.000 millones AUD (7.453 millones USD o 6.767 millones EUR).

BUSCAN A LOS RESPONSABLES

"Dada la magnitud y la naturaleza del problema denunciado por AUSTRAC, APRA quiere asegurarse que las deficiencias fundamentales en el marco de gestión de riesgo de Westpac son identificadas y tratadas, y que Westpac y los que sean responsables rindan cuentas", dijo el regulador en un comunicado.

El Westpac se enfrenta a una multa de 17 millones AUD (11,5 millones USD o 10,4 millones EUR) por cada violación. AUSTRAC denunció hace dos años al Banco Commonwealth por violar las mismas leyes contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo en unas 53.500 transacciones realizadas entre 2012 y 2015.