El Alto Tribunal Iraquí ha condenado hoy a muerte a Tarek Aziz, de 74 años, el que fuera mano derecha de Sadam Husein. Según fuentes judiciales, la cara amable del régimen iraquí será ejecutado en la horca por un delito de persecución de partidos islámicos.

Aziz, que ocupó los cargos de primer ministro y de ministro de Asuntos Exteriores del régimen iraquí, ya había sido condenado a dos penas de cárcel por su vinculación con ejecuciones extrajudiciales y por el desplazamiento forzado de kurdos. Actualmente cumplía condena en la cárcel de Camp Cropper, al oeste de Bagdad.

El tribunal también ha sentenciado a la horca al exministro de Interior Saadun Shaker y al que fuera secretario personal de Sadam Husein, por su relación con la depuración de los partidos religiosos.

LA CARA AMABLE

Tarek Aziz era la cara más amable del régimen de Sadam Husein y, con su brillante oratoria y capacidad negociadora, llegó a gozar de una cierta popularidad en la escena internacional. El 11 de marzo del año pasado el Alto Tribunal Iraquí --constituido tras la invasión de EEUU para juzgar alas figuras del régimen-- ya le condenó a 15 años de cárcel por la ejecución, en 1992, de 42 comerciantes acusados de haber concertado ilegalmente una subida de precios tras la crisis desatada por guerra del Golfo en 1991. Era la primera vez que Aziz, el único cristiano integrante del círculo más próximo a Sadam, era condenado por un delito desde que se entregó voluntariamente a las tropas de EEUU en abril del 2003, dos semanas después de la caída del régimen del dictador.

Antes, el mismo tribunal iraquí le absolvió de haber tenido ningún papel en el asesinato y el desplazamiento masivo de chiís en 1999.