El parlamentario conservador iraní Mohamad Karamirad ha declarado que la entrada ilegal en Irán de tres ciudadanos estadounidenses que al parecer realizaban senderismo y se perdieron en el Kurdistán iraquí está vinculada a las protestas que sacudieron el país tras los resultados de las elecciones presidenciales.

En declaraciones divulgadas por la agencia oficial de noticias Irna, el diputado se pregunta qué buscaban en Irán y por qué no habían pedido visados. "Su entrada ilegal no puede ser desvinculada de los disturbios postelectorales", ha subrayado.

TURISTAS PERDIDOS

El ministro iraquí de Asuntos Exteriores, Hoshyar Zibari, ha confirmado hoy la detención pero ha pedido a Irán que libere a los tres estadounidenses ya que en su opinión no son más que turistas perdidos. "Entraron en el país sin conocer el terreno. Caminaban sin mapas, no creemos que sea algo grave", ha dicho el jefe de la diplomacia iraquí.

Shane Bauer, de 27 años, Sarah Shourd, de 30 años, y Joshua Fattal, de 27 años, fueron detenidos el pasado 31 de julio cuando al parecer practicaban senderismo en una zona montañosa del Kurdistán iraquí, limítrofe con Irán.

Según fuentes de seguridad kurdas, se les advirtió que la frontera con Irán estaba muy cerca y que no la cruzaran.