Israel relanzó ayer la construcción de un nuevo asentamiento en el valle del Jordán, el primero en levantarse en los últimos 26 años en este corredor de tierra fértil. El proyecto estaba paralizado desde el 2006 por la oposición de EEUU, que ve la expansión de los asentamientos como uno de los obstáculos para la paz.

Tanto la oposición israelí como algunas oenegés criticaron el anuncio. "Es un mensaje claro a EEUU y a la comunidad internacional de los planes del Gobierno israelí para ampliar los asentamientos", dijo el secretario general de Paz Ahora, Yariv Oppenheimer. En Cisjordania viven casi 300.000 colonos judíos, un número tan alto que lleva a muchos analistas a pensar que la creación de un Estado palestino es técnicamente imposible.