El diario israelí Haaretz publicó ayer que Israel ha decidido transportar basura producida en el Estado hebreo hacia una cantera en territorio ocupado de Cisjordania. El proyecto vulnera los tratados internacionales --suscritos por Israel-- que prohíben a un país ocupante usar el territorio ocupado en provecho propio. Informes de expertos medioambientales indican que la basura pondrá en peligro una de las principales fuentes de agua de Cisjordania.

Una empresa israelí está construyendo el vertedero, cerca de Naplusa, pese a que el Ministerio de Medio Ambiente israelí no lo ha aprobado aún y la Administración Civil de Cisjordania ha ordenado detener las obras.