Doce palestinos muertos en dos días, entre ellos el jefe del brazo armado de Hamas. Decía el ministro de Defensa israelí, Shaul Mofaz, el domingo que la respuesta israelí a la muerte de cuatro soldados y la destrucción de un tanque el sábado sería "contundente". Dos días después en la Franja de Gaza han muerto nueve palestinos acusados de militar en Hamas. En Naplusa hubo tres muertos más.

Ayer, mientras Hamas y miles de personas enterraban a los seis militantes del movimiento fallecidos el domingo en una confusa acción atribuida a Israel, soldados israelís prepararon una emboscada contra Riyad Abu Zed, acusado de ser el jefe del brazo armado de Hamas. Abu Zed resultó gravemente herido cuando su coche fue tiroteado y murió en un hospital.

A la operación contra Abu Zed hay que añadirle la destrucción de viviendas de varios líderes de Hamas. Apoyados por tanques y helicópteros, los soldados encontraron resistencia en algunas operaciones, que se saldaron con dos palestinos muertos.

En el campo diplomático, ayer, fuentes israelís desvelaron que Ariel Sharon se ha entrevistado con Salam Fayed, el favorito para ocupar el puesto de primer ministro que Yasir Arafat ha prometido crear.