El Gobierno italiano ha decretado este sábado el estado de emergencia humanitaria por la llegada en los últimos días de más de 3.000 inmigrantes, procedentes en su mayoría de Túnez, a la isla mediterránea de Lampedusa, en un continuo trasiego de embarcaciones con origen en el norte de África. En un comunicado de prensa, el Ejecutivo que preside Silvio Berlusconi ha informado de la medida, que se ha aprobado en un Consejo de Ministros extraordinario convocado este sábado de modo urgente para hacer frente a la llegada de "numerosos ciudadanos norteafricanos al territorio meridional".
Según el Gobierno, el estado de emergencia permitirá la "inmediata adopción, con un mandato a la Protección Civil, de las medidas necesarias para controlar el fenómeno y asistir a los ciudadanos en fuga desde los países norteafricanos".
El ministro de Trabajo, Maurizio Sacconi, ha explicado que el Gobierno está en contacto con las autoridades de la Unión Europea (UE), a quienes ha acusado de "proceder con paso lento hasta ahora". El viernes el Ejecutivo italiano ya solició la convocatoria urgente de un Consejo Europeo de Justicia e Interior para abordar el asunto.
"RESPUESTA INMEDIATA"
"Pedimos que haya una respuesta inmediata por parte de la UE a la nueva situación creada, a la que Italia no puede hacer frente sola y que es de interés para Europa entera gestionar de manera eficaz y oportuna", concluía la nota. Las autoridades italianas atribuyen el aumento del flujo de inmigrantes hacia sus costas a la incierta situación que se vive en algunos países del norte de África por las revueltas populares contra sus regímenes políticos, así como al buen tiempo reinante en el canal de Sicilia.
Los medios de comunicación italianos, quienes han ofrecido en directo la llegada a Lampedusa poco después del mediodía de una nueva barcaza con una treintena de indocumentados, publican en sus páginas web imágenes del muelle Favaloro, próximo al aeropuerto de la isla, literalmente tomado por un elevado número de inmigrantes.
