Tras el ingreso en la Unión Europea (UE) de Polonia y Lituania un millón de habitantes del enclave ruso de Kaliningrado, la antigua Prusia Oriental, han quedado completamente aislados y rodeados por los nuevos ricos de la Unión. Esta separación pone de manifiesto los problemas económicos de este territorio occidental de Rusia, uno de los más pobres del país.

"Como resultado del ingreso de Polonia y Lituania en la Unión Europea, necesitamos un presupuesto mucho más alto para conseguir un nivel de vida equiparable al de nuestro entorno. Nuestra intención es acercarnos en el 2010 a los índices económicos de nuestros vecinos más próximos", declaró a este diario el gobernador de la región de Kaliningrado, Vladimir Yegorov.

Centro industrial

Kaliningrado, la capital de la región homónima, es un centro comercial e industrial de primer orden. Cuenta con plantas industriales de los sectores naviero, de maquinaria, químico, papelero y maderero. Pero según datos oficiales, el 40% de la población de la región --el 25% en el resto de Rusia-- vive bajo el umbral de la pobreza.

Durante la última década, el enclave ha perdido casi la mitad de su potencial industrial y agrícola. Pese a las repetidas promesas de la Comisión Europea de garantizar el flujo de inversiones occidentales para mejorar sus infraestructuras vitales, el enclave ruso sigue siendo poco atractivo para invertir a largo plazo, a causa de la complicada legislación rusa.

A uno le puede parecer que el paisaje apenas ha cambiado desde 1945, cuando Kaliningrado fue entregado a la Unión Soviética. Pero no es así. El interminable campo llano, abandonado y descuidado, es la imagen de la colonización a la soviética. Las décadas posteriores trajeron consigo una devastación sin precedentes. La URSS sacó de la antigua Prusia Oriental el 90% de su madera y el ladrillo de miles de los edificios arrasados fue enviado a Moscú.

Con la ampliación de la UE la región más occidental rusa afronta tantas oportunidades como riesgos e incertidumbres. Los acuerdos firmados entre Rusia y la UE para eliminar los aranceles aduaneros van a potenciar la economía de esta región. Al mismo tiempo, Kaliningrado es una región deficitaria, que necesita inversiones a gran escala para aspirar a un nivel de vida equiparable al de su entorno europeo.