No son los datos definitivos, pero todo parece indicar que el actual presidente de Afganistán, Hamid Karzai, renovará su mandato al frente del país asiático. El Comité Electoral Independiente (CEI) afgano dio a conocer ayer los resultados preliminares de las elecciones presidenciales del pasado mes.

Escrutados el 74,2% de los colegios electorales, Karzai ha obtenido el 48,6% de los votos, frente al 31,7% de su principal rival, Abdulá Abdulá. Así las cosas, Karzai se sitúa a menos de dos puntos para conseguir la mayoría absoluta, lo que le evitaría medirse en una segunda vuelta.

EL CEI aseguró que se han anulado los votos en 447 centros de voto, de un total de 25.450, por haberse detectado irregularidades. Los resultados facilitados ayer por la CEI siguen sin convencer a Abdulá que ha calificado los comicios de fraude masivo. El que fuera ministro de Exteriores con Karzai dice que el CEI da por buenos los resultados en colegios donde el actual presidente obtuvo el 100% de votos.

A la polémica sobre las elecciones presidenciales hay que sumar la del ataque aéreo de la OTAN del viernes en la provincia de Kunduz, que causó la muerte a varias decenas de personas.

Los fallecidos, tanto insurgentes como civiles, seguían ayer sin saberse. Según el diario The Washington Post , que cita como fuente la investigación que lleva a cabo la OTAN, el bombardeo mató a 125 personas, de las que al menos 24 eran civiles.

Además, el diario sostiene que el oficial alemán que ordenó el bombardeo se saltó la norma que prohíbe lanzar un ataque aéreo si la información del objetivo procede de una sola fuente, como parece que sucedió.

El bombardeo se produjo después de que un grupo de talibanes robara dos camiones cisterna que pretendían utilizar como armas contra las fuerzas alemanes desplegadas en Kunduz. Según todos los indicios, en el momento del ataque alrededor de los vehículos había insurgentes, pero también civiles.

La cifras del diario The Washington Post contrasta con los 54 muertos, seis de ellos civiles, dados por el gobernador de la provincia y la información que sostiene el Ministerio de Defensa alemán, según la cual todas las víctimas eran talibanes.