Kirobo es un robot japonés que ha sido enviado a la Estación Espacial Internacional para averiguar cómo pueden ayudar los robots a los astronautas en su trabajo. Mide unos 34 centímetros de alto y pesa alrededor de 1 kilo, es de color blanco y negro y lleva unas botas rojas.

El androide japonés está equipado con una voz y también contiene tecnología de reconocimiento facial. En un reciente demostración, el ingenio dijo: "Tengo la esperanza de crear un futuro donde los humanos y los robots convivan y se lleven bien".

El carguero que lleva al robot, lanzado este domingo desde el Centro Espacial de Tanegashima, en el suroeste de Japón, llegará a la estación internacional el próximo viernes, según el sitio web de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial.

Proyecto de 75 millones de euros

El interlocutor principal de Kirobo será el astronauta japonés Koichi Wakata, quien se espera que vaya hacia la estación espacial con otros seis miembros de la tripulación en noviembre. El robot, un proyecto de 100 millones de dólares (unos 75 millones de euros) en 15 países y desarrollado conjuntamente por la Universidad de Tokio, Toyota Motor Corp y Dentsu Inc, permanecerá en el espacio hasta finales del 2014.

Kirobo es un nombre compuesto por dos palabras japonesas: 'kiro', que significa esperanza, y 'robo', que hace referencia a la palabra robot.