La oposición y algunos analistas empiezan a hablar de Woerthgate e incluso de Sarkogate . La comparación con el famoso Watergate --escuchas ilegales que costaron el cargo al presidente de EEUU Richard Nixon-- se debe a la aparición de un supuesto espionaje de Estado en el escándalo que afecta al ministro de Trabajo, Eric Woerth. El diario Le Monde acusó ayer al Elíseo de ordenar a los servicios de contraespionaje una investigación que utilizó métodos ilícitos para cortocircuitar las fuentes de información del diario.

La presidencia de la República desmintió "totalmente" las afirmaciones difundidas por el rotativo. No obstante, Le Monde anunció en su edición de ayer tarde la presentación de una querella por "violación del secreto de las fuentes". Se trata, justamente, de un aspecto incorporado a la ley sobre la protección del secreto de las fuentes de los periodistas por voluntad del propio Nicolas Sarkozy.

CONTROL TELEFONICO "A fin de identificar la fuente de las informaciones publicadas por Le Monde sobre el caso Woerth-Bettencourt y de intentar poner fin a las revelaciones sobre esta investigación, el Elíseo recurrió, el pasado mes de julio, a procedimientos que vulneran la ley", denunció la directora de la redacción, Sylvie Kauffmann. Estos procedimientos consistían básicamente en el control de las llamadas telefónicas de uno de los redactores encargados de informar sobre la investigación judicial llevada a cabo.

El sospechoso de ejercer el papel de Garganta profunda --nombre que le pusieron a su fuente los periodistas del Watergate --, Davit Sénat, consejero penal del gabinete de la ministra de Justicia, Michèle Aliot-Marie, ha sido trasladado intempestivamente a ultramar. Según la versión oficial, Sénat ha solicitado voluntariamente un destino en la Guyana francesa, en Suramérica.

Le Monde afirma que los servicios de contraespionaje intervinieron a raíz de la publicación de revelaciones sobre las condiciones en las que fue empleada la esposa de Woerth, Florence, por el gestor de la fortuna de Liliane Bettencourt, Patrice de Maistre.

CONFLICTO DE INTERESES El gestor actuó supuestamente a petición del ministro, por lo que ha sido acusado de conflicto de intereses. Su esposa se ocupaba de los activos de Bettencourt --la mujer más rica de Francia, acusada de evadir impuestos-- cuando Woerth era ministro del Presupuesto y martillo de los defraudadores del fisco.

Hasta ahora, Sarkozy ha apoyado al ministro, encargado de conducir la delicada reforma de las pensiones, aduciendo que era objeto de una campaña de descrédito. Pero Woerth ya figura entre los ministros quemados que podrían dejar el Gobierno este otoño.