La liberación de los periodistas franceses Christian Chesnot y Georges Malbrunot "no es inminente", sino que será "cuestión de días", según informó ayer la compañera sentimental del segundo, Sylvie Cherpin. El Consejo de Ulemas de Irak aseguró que los dos reporteros secuestrados se encuentran "fuera de peligro". No obstante, las autoridades francesas acogieron la noticia con "prudencia", ya que todavía quedan muchos cabos sueltos, según dijo un portavoz.

El rector de la mezquita de París, Dalil Boubakeur, quien permanece en contacto con los tres miembros del Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM) que viajaron a la región y esperan en Ammán (Jordania) la liberación de los rehenes, señaló que los periodistas deben ser entregados rápidamente a las autoridades francesas en Bagdad a través de los ulemas. "Estamos esperando con esperanza y prudencia", manifestó.

No obstante, fuentes diplomáticas francesas consideran que la liberación será más complicada de lo previsto. "Tenemos informaciones positivas, pero hay que superar diversas etapas", reconoció ayer el primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin. Al parecer, la caótica situación sobre el terreno dificulta la entrega de los rehenes en condiciones de seguridad.

La compañera de uno de los reporteros, Sylvie Cherpin, regularmente informada por las autoridades, manifestó: "Me han dicho que no es cuestión de horas, sino que podrían ser días". Según estas informaciones, agregó Cherpin, "la situación es como la de ayer: los dos rehenes están vivos y bien, pero no fuera de peligro".

MULTIPLES CONTACTOS El ministro de Asuntos Exteriores francés, Michel Barnier, decidió prolongar su estancia en Ammán, donde multiplica los contactos con las autoridades religiosas de Bagdad. La embajadora de Francia en Jordania, Dina Kauar, estimó que la liberación de los periodistas podría hacerse vía la capital jordana.

En Irak, el clérigo radical shií Moktada al Sadr hizo un nuevo llamamiento en favor de la liberación de los periodistas, calificando su secuestro de "acto inhumano". Estas acciones "ensucian la imagen de la resistencia iraquí", argumentó.