El presidente colombiano, Alvaro Uribe, asumió ayer la responsabilidad por la utilización indebida del símbolo del Comité Internacional de la Cruz Roja durante la operación Jaque del Ejército, con la que se rescató a Ingrid Betancourt y a otros 14 rehenes de las FARC. Uribe se vio obligado a "lamentar" el ardid y a pedir disculpas. La CNN informó del hecho tras recibir de una fuente militar un vídeo y tres fotos. Uribe dijo haber ordenado entonces una investigación. Y, cuando tuvo las pruebas, explicó: "Un oficial, contrariando las órdenes, reconoció que producto de su nerviosismo, al observar la cantidad de guerrilleros, se puso sobre su chaleco un peto de tela con el símbolo de la Cruz Roja". El oficial confesó el "error" "a los altos mandos".