El Ministerio de Defensa del Reino Unido ha iniciado un estudio sobre las lesiones cerebrales que han podido sufrir los soldados británicos desplegados en Irak y en Afganistán, ante el temor de que podría haber hasta 20.000 militares afectados, según reveló ayer el diario The Guardian .

El Ejército estadounidense ha señalado que el 20% de sus soldados y marines ha sufrido una lesión traumática del cerebro a consecuencia de los golpes recibidos en la cabeza o de las ondas expansivas causadas por las explosiones en estos destinos de guerra.

El Departamento de Defensa de EEUU ha puesto en marcha un programa de revisiones médicas a gran escala para detectar en los soldados esa posible dolencia, que puede causar pérdida de memoria, depresión y ansiedad.

Las autoridades británicas de Defensa son reacias a extrapolar directamente en el Reino Unido el ejemplo estadounidense, con el argumento de que la experiencia de estos países en Irak y Afganistán ha sido distinta, pero, según The Guardian , han puesto en marcha una serie de medidas, entre ellas un proceso de revisiones médicas.

Si se cumplen las predicciones estadounidenses más alarmantes, hasta 20.000 soldados británicos podrían sufrir esa lesión cerebral. "No sabemos si los estadounidenses están en lo correcto. Pero si sus cifras son correctas, esto es absolutamente masivo", declaró Kit Malia, un terapeuta que supervisará el programa para tratar a los soldados en el Reino Unido.

GOLPE EN LA CABEZA Malia explicó que Defensa informará a los militares sobre los síntomas y los planes para hacer revisiones. Esta lesión cerebral puede ocurrir cuando el militar sufre un golpe en la cabeza o está próximo a una explosión y el riesgo de padecerla se ha incrementado por el mayor uso de artefactos explosivos improvisados en los dos conflictos bélicos.