Salman Rushdie ya advirtió hace bastantes años que corren tiempos difíciles para la libertad de expresión. La cortina teológica del islam se interpone y también impone su visión del orbe en este encuentro de mentalidades que estamos viviendo. Los Veinticinco que integran la actual UE han desperdiciado una ocasión de oro en este su primer comunicado conjunto para definirse sobre la problemática de las viñetas sin apelar a las grandes y bellas generalidades. ¿Hay alguien que no quiera ser libre? Tal vez, pero el conflicto no se resuelve con unas frases de manual.

*Periodista.