Al menos 46.068 personas han muerto violentamente en Siria desde que comenzó el conflicto entre el Gobierno de Bashar al Assad y los grupos enfrentados al régimen, en marzo de 2011, según ha informado este martes el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.

Según los datos de la organización --con sede en Londres, pero con una importante red de informantes dentro de Siria--, esta cifra incluye 32.216 civiles y combatientes rebeldes, 1.535 soldados desertores, 11.487 militares del régimen de Bashar al Assad y 830 personas no identificadas.

El balance definitivo de la jornada de ayer lunes, último día de 2012, es de alrededor de 160 muertos, incluidos 67 civiles (once niños), 41 combatientes rebeldes, tres soldados desertores y 37 soldados del Ejército regular, según el Observatorio.

El año 2013 ha comenzado con la muerte de al menos 45 personas, entre ellos ocho niños y cuatro mujeres, según ha informado la organización opositora Comités de Coordinación Local. En concreto, ha habido 25 muertos en Hama, siete en Damasco y sus alrededores, cinco en Homs, cuatro en Deir al Zor, uno en Idlib, uno en Deraa, otro en Alepo y otro en Raqqa.