Los sindicatos franceses mantienen su pulso con Emmanuel Macron. Este lunes, la huelga en el sector de los transportes ha provocado desde primera hora de la mañana retenciones de más de 620 kilómetros en las carreteras de la región de Ile-de-France (París y alrededores), según ha informado la web de información de tráfico Sytadin.

De media, a las 08.45 horas, momento en que se han registrado los 628 kilómetros de colas, las retenciones en esta zona son de entre 200 y 350 kilómetros. Sytadin ha calificado la situación de "excepcional". El récord de embotellamientos en los alrededores de París se sitúa en 739 kilómetros, registrados el 6 de febrero del 2019 tras una intensa tormenta de nieve,

La situación se ha agravado por las lluvias que afectan la región. El acceso al centro de París desde la carretera A4 está cerrado por inundaciones.

Esta situación evidencia que el conflicto de las pensiones se encona en Francia. Los paros en el transporte público de la región parisina se repiten sin visos de mejora y con la amenaza de llegar hasta Navidades, complicando notablemente la vida cotidiana de los usuarios. Los atascos, las manifestaciones y los despliegues policiales se han convertido en parte del paisaje urbano.

Lejos de rebajar la tensión, el Gobierno se ha echado encima a la izquierda y a todos los sindicatos tras desvelar el contenido de la reforma que pretende terminar con los 42 regímenes actuales para unificarlos en un sistema universal por puntos. Solo la patronal está satisfecha con un texto que, según el Ejecutivo, todavía es negociable.