Más del 70% de refugiados e inmigrantes que recorren a pie el continente africano y cruzan en patera el Mediterráneo han sido víctimas de tráfico de personas, tráfico de órganos y explotación durante su larga odisea hacia Europa, según un informe divulgado este martes por la Organizacion Internacional de las Migraciones (OIM).

La encuesta realizada por la OIM sobre los inmigrantes que llegan a Europa en precarias barcazas desde el norte de África revela que cerca de tres cuartas partes muestran fuertes indicadores de haber sido víctimas del tráfico humano o explotados con fines de lucro por delincuentes en algún momento del viaje.

Así, casi la mitad de los encuestados (49%) confesaron haber sidoretenidos en algún lugar contra su voluntad, a menudo a cambio de un rescate. La mayoría de estos casos tuvieron lugar enLibia.

La mitad de los inmigrantes explican que tuvieron que trabajar sin cobrar, muchos de ellos amenazados con armas por un capataz o un intermediario laboral. Otros afirmaron que los trabajos forzados fueron su único medio de ser liberados del cautiverio o de asegurarse una plaza en una patera con destino a Europa.

TENDENCIA EMERGENTE

La encuesta, realizada a más de 9.000 inmigrantes llegados a distintas localidades del sur de Italia, revela también una tendencia emergente de tráfico de órganos y de sangre: el 6% de los encuestados afirmaron haber conocido casos de personas obligadas a donar sangre contra su voluntad o durante su cautiverio, o incluso de órganos utilizados para pagar etapas del viaje.

De las respuestas obtenidas se deduce que los hombres son más proclives a ser víctimas del tráfico de personas que las mujeres, aunque la OIM no hizo preguntas específicas sobre prostitución forzada o tráfico para la explotación sexual.

La encuesta también demuestra que cuánto más largo es el viaje,más vulnerables son los inmigrantes a ser explotados o a caer en manos de los traficantes: los que pasan seis meses o más en su viaje a Europa tienen el triple de probabilidades de ser víctimas de explotación criminal que los que están en países de tránsito menos de dos semanas.

SONDEO DURANTE 10 MESES

La OIM pasó 10 meses recogiendo los datos de los inmigrantes de forma anónima, y además obtener información sobre la prevalencia del trabajo forzoso y el tráfico de órganos, la encuesta también preguntó sobre matrimonio, y matrimonio forzoso, mientras están en tránsito. Algo menos del 1,5% respondieron haber recibido una oferta de matrimonio a cambio de dinero a lo largo del viaje.

Una encuesta paralela llevada a cabo a lo largo de la ruta delMediterráneo oriental -en la que refugiados e inmigrantes viajan por tierra vía Turquía y Grecia- muestra que el 14% de los que usaron esta ruta terrestre fueron víctimas de tráfico humano y de explotación. Cerca del 6% declaró haber sido retenido contra su voluntad, y el 7% trabajó sin remuneración.

El 4% de estos inmigrantes denunciaron haber sido obligados a trabajar en contra de su voluntad, en la mayoría de los casos en Turquía. Los incidentes de tráfico de órganos y de sangre se registraron en Turquía, Grecia, Albania, Macedonia y Serbia.

REDES BRUTALES Y EFICIENTES

La OIM ha señalado que estas encuestas son el primer intento de cuantificar la prevalencia, magnitud y frecuencia de la explotación laboral y otras formas de tráfico de personas en las principales rutas migratorias.

“Lo que estas encuestas muestran es que las redes de tráfico de seres humanos son cada vez más brutales y eficientes en la explotación y la obtención de beneficios de la vulnerabilidad de los inmigrantes”, ha declarado Simona Moscarelli, experta de la OIM en la lucha contra la trata de personas.

“Todavía hay muy poco conocimiento real de la magnitud de este negocio o de simplemente la cantidad de dinero que se está obteniendo de la miseria y del trabajo de las personas que huyen de la guerra o de la pobreza”, ha añadido Moscarelli.