Al menos 13 civiles han muerto este sábado en varios lugares de Siria por los disparos de las fuerzas de seguridad en puestos de control y durante un funeral, entre otras operaciones de represión del régimen de Bashar al Asad, según ha informado el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Según la oenegé opositora, cuatro personas han muerto en la localidad de Maaret al Neeman, en Idleb (norte), cuatro en la provincia central de Homs, tres en Hersata, en los alrededores de Damasco, y dos en Derá, en el sur del país.

Las víctimas de Maaret al Neeman, refugio de un gran número de militares desertores, se produjeron cuando las fuerzas del régimen dispararon contra las personas que asistían al funeral de un menor fallecido la víspera. Mientras, en la rebelde ciudad de Homs, los disparos de las fuerzas de seguridad en varios puestos de control han causado dos muertos en el barrio de Al Bayada y uno en el de Al Jalidiya. Además, un cuarto civil ha fallecido en la localidad de Teldu de la provincia de Homs, uno de los bastiones de la oposición y objeto de una fuerte represión desde hace semanas, debido a las heridas de bala que sufrió hace cinco días.

Disparos y torturas El Observatorio ha denunciado también la muerte de tres hombres de entre 28 y 38 años en Hersata, al este de la capital, que fallecieron a causa de las torturas que les infligieron los cuerpos de seguridad durante su detención. En Derá, dos personas han fallecido por disparos procedentes de puestos de seguridad en dos aldeas de esta provincia. Estas nuevas víctimas se producen un día después de que las operaciones de las fuerzas leales a Al Asad causaran más de cuarenta muertos, entre ellos siete niños y una mujer, en distintas zonas del país.

Desde mediados del pasado mes de marzo, cuando comenzaron las protestas populares en contra del régimen de Al Asad, más de 4.000 personas han muerto a causa de la represión de las fuerzas de seguridad, según datos de la ONU. Aviso de Francia La situación en el país árabe preocupa a la comunidad internacional, que ha adoptado, por ahora, una política de sanciones contra Siria. Este sábado Francia ha dado un nuevo toque de atención al régimen de Asad. El Ministerio de Asuntos Exteriores ha advertido a las autoridades sirias de que las considera 'responsables' de todas las acciones contra la población, y en particular en la ciudad de Homs, en alusión a las informaciones que apuntan que Damasco estaría preparando una operación de represión en Homs.

'Francia advierte al Gobierno sirio y considera responsables a las autoridades sirias de todas las acciones contra la población y de las consecuencias que podría tener una operación así contra la ciudad de Homs', ha señalado el portavoz del ministerio que dirige Alain Juppé. 'Francia está profundamente preocupada por las informaciones sobre una operación militar de envergadura que las fuerzas de seguridad sirias están preparando contra la ciudad de Homs', ha añadido.