Al menos 29 niños murieron ayer y otros 30 resultaron heridos durante un bombardeo contra varios autobuses en el norte de Yemen, según afirmó el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), que agregó que los cuerpos de las víctimas fueron enviados a un hospital en la provincia de Saada. El ataque aéreo fue perpetrado por la coalición árabe comandada por Arabia Saudí. El bus que trasladaba a los menores, todos ellos de entre 10 y 15 años, circulaba a través del mercado de la ciudad de Dahian.

«¿El mundo realmente necesita ver a más niños muertos? ¿Inocentes asesinados para detener la cruel guerra en Yemen?», respondió el director del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) para el Oriente Medio, Geert Cappelaere. «Según el derecho internacional humanitario, los civiles deben ser protegidos durante el conflicto», agregó el Comité Internacional de la Cruz Roja, que a menudo ha acusado a las partes beligerantes de atacar objetivos teóricamente protegidos.

El portavoz del Ministerio de Salud del Gobierno de los hutís, la facción en guerra con las autoridades yemenís respaldadas por la coalición liderada por Arabia Saudí y Estados Unidos, indicó que al menos 29 personas murieron y otras 43 (30 de ellos también niños) resultaron heridas, según las primeras informaciones. «El bombardeo tuvo como blanco a tres autobuses», explicó el portavoz hutí, Yusef al Hadari, desde Saná, la capital del país bajo el control de los rebeldes.

La coalición liderada por Arabia Saudí, que interviene en Yemen en apoyo de las fuerzas del presidente Abd Rabbo Mansour Hadi, describió el ataque como una «operación militar legítima». Los responsables del ataque no especificaron el objetivo del mismo. «El ataque que se produjo en la provincia de Saada es una operación militar legítima contra los elementos que la pasada noche dispararon un misil contra la ciudad de Jizane (Arabia), matando a una persona e hiriendo a varios civiles», explicó la coalición en un comunicado.

La provincia de Saada, fronteriza con Arabia Saudí, es el principal bastión de los rebeldes hutís. El bombardeo se produjo horas después de que se lanzara un misil balístico desde Yemen contra la ciudad saudí de Yazán.

Según Riad, en este ataque murió un yemení residente en Arabia Saudí y otros once resultaron heridos. Según las Naciones Unidas, más de 10.000 personas han muerto desde el 2015 por el conflicto entre ambos países.