Al menos 50 personas han muerto el martes en un atentado suicida en una mezquita en el noreste de Nigeria, en la región de Adamawa. Fuentes policiales han insistido en que el número de víctimas mortales podría aumentar porque el número de heridos graves es muy elevado. Se trata de uno de los atentados más mortíferos del último año.

Los primeros indicios apuntan a que el autor del ataque, un adolescente, era miembro del grupo yihadista Boko Haram y un desconocido para la gente de la zona. El atentado tuvo lugar en Dezala, una comunidad en el término de North Mubi.

La estrategia de los islamistas de Boko Haram es atentar en lugares públicos especialmente atestados de gente, como es el caso de mezquitas y supermercados.

La explosión tuvo lugar durante el momento del rezo matinal musulmán, el fajr, y los muertos y heridos eran fieles que practicaban este rito en un templo en el estado de Adamawa, informó el director de la Agencia de Administración de Emergencias del Estado, Haruna Furo.