Al menos seis personas resultaron heridas hoy en dos atentados bomba perpetrados por el movimiento separatista musulmán en el sur de Tailandia, al día siguiente de que el Gobierno y un grupo islámico insurgente acordasen iniciar conversaciones de paz dentro de dos semanas.

La primera explosión fue en un mercado de Narathiwat, capital de la provincia homónima, sobre las seis de la mañana y causó las seis víctimas, incluido un soldado, además de dañar varios vehículos aparcados en la zona, según fuentes militares citadas por los medios locales.

La segunda explosión correspondió a un coche cargado con unos 20 kilogramos de explosivos que estalló también en esa capital provincial frente a la comisaría del distrito de Muang y al lado de varias tiendas, y no causó heridos graves.

Los atentados ocurren al día siguiente de que el Gobierno de Tailandia y el Barisan Revolusi Nasional (BRN, Frente Nacional Revolucionario) acordasen iniciar negociaciones para la paz en un encuentro histórico en Kuala Lumpur.

El Barisan Revolusi Nasional está considerado por los analistas como uno de los distintos s grupos que forman la rebelión musulmana en el sur tailandés.

Fuentes militares tailandesas señalaron que esta organización no controla a todas las bandas de insurgentes, sobretodo a las más activas y violentas.

Los atentados con armas ligeras, asesinatos y ataques con explosivos en las provincias de Pattani, Narathiwat y Yala se repiten casi a diario a pesar del despliegue de unos 40.000 efectivos de las fuerzas de seguridad y la vigencia del estado de excepción.

Más de 5.300 personas han perdido la vida en el sur de Tailandia a causa de este conflicto desde que el movimiento separatista musulmán despertó de un letargo de diez años, en 2004.

Los insurgentes denuncian la discriminación que sufren por parte de la mayoría budista del país y exigen la creación de un Estado islámico que integre estas tres provincias, que configuraron el antiguo sultanato de Pattani, anexionado por Tailandia hace un siglo.