Al menos quince personas murieron hoy, entre ellas ocho miembros de la misma familia, y 26 resultados heridas en atentados separados en la provincia oriental iraquí de Diyala, informó a Efe una fuente policial. El ataque más mortífero ocurrió en el pueblo de Al Yil, 20 kilómetros al sur de Baquba, capital de la provincia, donde ocho personas fallecieron y otras cuatro resultaron heridas, todas de la misma familia, después de que un grupo armado irrumpiera al amanecer en las viviendas de dos hermanos. Uno de ellos era dirigente de un Consejo de Salvación, milicia tribal suní progubernamental. Además, dos policías que se dirigía al lugar del suceso resultaron heridos por la explosión de un artefacto al paso de su patrulla.

El otro atentado dejó siete muertos y veinte heridos al estallar un coche-bomba en un mercado de fruta y verdura en Al Jales, 25 kilómetros al norte de Baquba. La fuente dijo que el número de víctimas en este ataque es provisional y no descartó que pueda aumentar. La explosión causó además grandes daños en vehículos aparcados cerca. Estos incidentes ocurren mientras se produce el repliegue de las tropas estadounidenses en Irak, que culminará a finales de este mes con una ceremonia en el aeropuerto de Bagdad.

El presidente de EEUU, Barack Obama, anunció el 21 de octubre pasado la retirada total de los soldados desplegados en territorio iraquí antes de finales de año, tal y como lo estipula el tratado de seguridad suscrito por Bagdad y Washington en 2008. Ese anuncio se produjo después de tensas negociaciones para mantener una cierta presencia militar estadounidense para ayudar en el entrenamiento de las tropas iraquíes, pero los dos países no llegaron a un acuerdo al respecto. El vicepresidente estadounidense, Joe Biden, de visita en Irak, aseguró ayer que todo va según lo previsto y que las tropas de su país están cumpliendo con el calendario de retirada.