Al menos seis personas murieron hoy y un número indeterminado resultaron heridas en tiroteos entre opositores y leales al régimen de Alí Abdalá Saleh en el centro de Saná, según pudo constatar Efe.

Las víctimas son cinco civiles y un soldado perteneciente a las fuerzas del general desertor Ali Mohsen Al Ahmar. Con estas bajas, el número de fallecidos en los choques entre opositores y las fuerzas progubernamentales, que estallaron hace dos días en Saná y Taiz, en el sur, asciende ya a 52 personas, la mayoría civiles y militares desertores.

Las autoridades yemeníes cerraron anoche el aeropuerto internacional de la capital durante seis horas para que "los vuelos no se vean afectados por el deterioro de la situación de seguridad", informaron a Efe fuentes del aeródromo.

En el ámbito político, una fuente de la oposición aseguró que los opositores han rechazado reunirse con el enviado especial de la ONU para el Yemen, Yamal Benomar, y con el secretario general del Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico (CCG), Abdelatif al Ziani, que llegaron ayer a este país.

Desde el pasado 27 de enero, el Yemen vive una revuelta popular que pide la salida de Saleh, quien se encuentra convaleciente en Arabia Saudí recuperándose de las heridas que sufrió en un atentado el 3 de junio pasado.

Saleh delegó el pasado 12 de septiembre la autoridad en el vicepresidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, para negociar un traspaso pacífico del poder con la oposición, que no se ha mostrado satisfecha por este gesto porque considera que no se cumplen sus demandas.