Al menos tres peregrinos iraníes murieron hoy y otros quince resultaron heridos en un atentando cuando se dirigían a visitar la ciudad santa chií de Kerbala, informaron fuentes policiales a Efe.

El ataque fue perpetrado con un artefacto que explotó en el interior del autobús que transportaba a los viajeros en la zona de Iskandariya, a 40 kilómetros al sur de Bagdad.

Los peregrinos iban a Kerbala, donde se encuentra el santuario y mausoleo del imán Al Husein, nieto del profeta Mahoma, para participar en una festividad chií que se celebra quince días antes del inicio del mes de ayuno musulmán de Ramadán.

El imán Husein murió en el año 680 d.C. en la batalla de Kerbala contra el califa omeya Yazid I, momento que se considera el cisma entre las confesiones suní y chií, las dos principales del islam.

Irak vive actualmente un repunte de la violencia con numerosos atentados, especialmente contra chiíes y las fuerzas del orden.

El pasado mes de mayo fue el más sangriento en Irak desde hace más de cinco años, con la muerte de 1.045 personas en actos de violencia, según la misión de la ONU en este país (UNAMI).