El tiroteo que ayer causó nueve muertos en pleno centro de Múnich ha dejado intrigado a toda Alemania, también a su cancillera Angela Merkel. La líder alemana se ha reunido este mediodía de urgencia en Berlín con su gabinete de seguridad, ministros y otros expertos para determinar una respuesta clara y esclarecer el trasfondo de la masacre vivida ayer en la capital del estado de Baviera. “Todos estamos de luto”, ha lamentado.

En una breve comparecencia que tan sólo ha durado tres minutos, la cancillera alemana ha dado el pésame a la ciudad y a sus ciudadanos tras una “noche de terror” y ha reiterado su apoyo a los cuerpos de seguridad y de emergencia de la ciudad. Ayer la policía desplegó un amplio operativo y los hospitales de Múnich movilizaron a todos sus profesionales para capturar al autor y atender a los heridos. “Compartimos su dolor, pensamos en ellos, sufrimos con ellos”, ha reiterado Merkel.

Más tarde el ministro del Interior Thomas de Maizière ha comparecido para confirmar que el autor del tiroteo no tenía ningún vínculo con el terrorismo yihadista y que engañó a las víctimas para convocarlas en el restaurante McDonald’s y posteriormente asesinarlas. “Cuando ves tantos jóvenes y niños entre los muertos se te rompe el corazón”, ha confesado.

De Maizière ha apuntado que el muchacho, identificado como David S. o Ali, viene de una familia chiíta pero que no era religioso. “Estamos en estado de shock pero no debemos saltar a conclusiones antes de tiempo”, ha reiterado apuntando que aún hacen falta más detalles para conocer las motivaciones del ataque.

RESPUESTA A LA ALEMANA

Merkel ha sido duramente criticada por sus opositores por haber esperado hasta este mediodía para pronunciarse. Por otro lado, otros han alabado a la cancillera por haber esperado hasta tener información clara y no haberse precipitado antes de tiempo. Durante las últimas horas la jefa del Ejecutivo alemán ha hecho gala de su carácter tranquilo y pragmático, respondiendo con calma y sin prestar atención a la tensión mediática.

Esta respuesta a la alemana, que han seguido otros políticos de su gabinete compuesto por conservadores y socialdemócratas, contrasta con la que dio por ejemplo el presidente francés François Hollande tras los atentados en París y Niza. Antes de que se esclarecieran los motivos del ataque y se detallasen las características del autor, Hollande anunció nuevas medidas contra Estado Islámico y la prorrogación del estado de emergencia.

¿Quién si ha intentado sacar rédito político al ataque de Berlín ha sido la líder de la formación ultraderechista Alternativa por Alemania(AfD), Frauke Petry. En un único comentario en su perfil de Twitter la presidenta del partido xenófobo ha asegurado que “si está es la normalidad en 2016, ¡no quiero ser normal!”. Más directo fue el diputado en Sajonia André Poggenburg. “Gracias Merkel por el terror en Alemania y Europa”, ha sentenciado en un tuit.