Inspectores de la ONU están ya visitando la zona de Damasco donde supuestamente tuvo lugar el ataque con armas químicas denunciado por la oposición al régimen de Bashar al Asad. El presidente de Siria autorizó el domingo la misión en un comunicado difundido por la televisión estatal.

Un convoy formado por seis vehículos ha abandonado a primera hora de este lunes el hotel de Damasco donde estaban alojados y se han dirigido a la zona de Guta Oriental, a las afueras de la capital, donde supuestamente la semana pasada murieron más de mil personas víctimas de un ataque químico perpetrado por las tropas de Asad. Según un testigo de la agencia Reuters, el convoy ha salido acompañado de fuerzas de seguridad y de una ambulacia.

Coincidiendo con la visita, se han escuchado al menos dos explosiones en uno de los distritos bienestantes de Damasco, cerca del lugar donde se ha instalado la misión de la ONU. Vecinos han informado a Reuters que una de las bombas ha caído cerca del Hotel Four Seasons, donde se alojan los inspectores. El régimen sirio ha reaccionado asegurando que se trata de un ataque de los "terroristas", en alusión a los rebeldes.