El primer ministro de Líbano, Najib Mikati, ha calificado este miércoles de "injustificada e inaceptable" la acusación vertida el martes por el embajador sirio en Beirut, Alí Abdelkarim Alí, quien afirmó que el Ministerio de Asuntos Sociales presta ayuda a los refugiados sirios en base a su afiliación política.
"El Gobierno y todos sus ministerios y organismos no han discriminado en ningún momento entre los seguidores y los opositores al régimen sirio", ha dicho Mikati durante un encuentro gubernamental sobre refugiados en el que estaba presente el ministro de Asuntos Sociales, Wael Abu Faur. En este sentido, ha destacado que el Ejecutivo está haciendo frente a la situación "desde un punto de vista humanitario".
En diciembre, Alí aseguró que la Embajada siria en Líbano había recibido varias quejas de refugiados sirios sobre la existencia de "organizaciones salafistas extremistas" que estaban chantajeando a los refugiados y explotando su situación para favorecer sus intereses.
En sus acusaciones, el embajador sirio afirmó que estas organizaciones se ofrecían a ayudar a los refugiados a recibir la ayuda entregada por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) a condición de que afirmaran estar en contra del Gobierno sirio y aceptaran unirse a la oposición.
Por último, Mikati ha manifestado que el Gobierno "ha sido capaz de satisfacer las demandas de los refugiados sirios desde el inicio de la crisis política en Siria", aunque ha agregado que el incremento del número de refugiados registrado en las últimas semanas ha provocado que sus capacidades se vean superadas, según ha informado el diario libanés 'An Nahar'.
