Berlín. -- Miles de trabajadores de la factoría Mercedes de Singelfinden (sur de Alemania) han secundado las convocatorias de paros contra los planes de recorte de gastos de DaimlerChrysler, entre críticas del Partido Socialdemócrata (SPD) contra las presiones de los consorcios a sus plantillas.Unos 12.000 trabajadores del turno de mañana de Singelfinden, la mayor planta de Mercedes del país, no han acudido a sus puestos de trabajo, de acuerdo con la tónica de paros parciales emprendida el pasado jueves en ésta y otras factorías de esa marca.Otros 2.500 empleados de Stuttgard han secundado asimismo la jornada de protesta, dentro de las llamadas a la movilización contra los planes del consorcio, que en los días pasados paralizaron la producción de la filial de DaimlerChrysler.Las acciones de los trabajadores se dirigen contra la intención de la compañía de recortar gastos y las amenazas de suprimir unos 6.000 de los 30.000 puestos de Singelfinden para desplazar parte de su producción a lugares de costes más bajos.El presidente del SPD, Franz Müntefering, acusó a las cúpulas de algunos consorcios alemanes de estar sacando provecho de la situación y del miedo a una reducción de plantilla para presionar a sus trabajadores."Están apareciendo rituales que yo confiaba estaban desde hace tiempo erradicados", ha dicho Müntefering, en unas declaraciones que publica hoy el diario Berliner Zeitung.Tras especificar que no citaría "casos concretos", el líder de la formación de Gerhard Schröder ha criticado la estrategia de "ciertos consorcios" de tratar de presionar sobre sus plantillas con amenazas de deslocalización de la producción.Los sindicatos tienen razón cuando hablan de "ataque organizado" contra los derechos del trabajador, ha añadido el líder del SPD, partido mayoritario del Gobierno de Gerhard Schröder.