Un grupo de jóvenes activistas israelís puso ayer las bases para el establecimiento de 13 nuevas colonias salvajes en Cisjordania. La información fue divulgada por la emisora de la radio militar israelí y desató las protestas de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y de los movimientos judíos opuestos a la colonización de los territorios. Nabil Abú Rudeina, portavoz del presidente palestino Abú Mazen, exigió a Israel que "ponga fin a estas actividades y suprima esos puestos".

Fuentes militares israelís intentaron restar importancia a la avanzadilla colonizadora y afirmaron que, "hasta ahora, los jóvenes activistas sólo han levantado meras estructuras simbólicas y provisionales para hacer acto de presencia". El Gobierno de Israel sigue haciendo la vista gorda frente al centenar de colonias salvajes que los judíos más recalcitrantes mantienen en Cisjordania, pese a que la Hoja de ruta le obliga a suprimirlos.

PROTESTA En armonía con este desafío a la comunidad internacional, el Gobierno del primer ministro Ariel Sharon autorizó ayer la construcción de nuevas viviendas en tres asentamientos de Cisjordania. La ANP anunció que presentará una queja formal ante el Cuarteto --Rusia, EEUU, la UE y la ONU-- por la expansión de las colonias.

En el frente militar, mientras, el Ejército israelí bombardeó varios objetivos clave de la franja de Gaza, en especial oficinas de Al Fatá, el partido de Abú Mazen. Según fuentes militares, los ataques se llevaron a cabo en respuesta al lanzamiento de cohetes caseros por parte de militantes de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa.