Con un triste récord de permanencia bajo tierra, los 33 mineros chilenos se preparan este fin de semana para comunicarse por fibra óptica con sus familias. "Las conversaciones serán privadas", aseguró el ministro de Salud, Jaime Mañalich. Los trabajadores de la mina San José recibieron a su vez rosarios bendecidos de Benedicto XVI. "Han afrontado esta enorme dificultad con mucha fortaleza y disciplina", dijo el cardenal Francisco Javier Errázuriz durante una misa ante la mina. Las circunstancias han hecho reverdecer la fe de los obreros atrapados.

Los encargados del rescate comenzaron a estudiar las posibilidades de un plan C que pudiera acelerar el momento del regreso. Con esos fines ha sido enviada a Copiapó una máquina de perforación petrolera y se incorporará a los artefactos que ya ahondan la tierra.