En un clima de absoluta tranquilidad, Montpellier --conocida como el San Francisco francés-- ultima los preparativos de la primera boda gay en Francia prevista para las 17.30 horas de este miércoles en el Ayuntamiento de la localidad francesa. El 'sí quiero' de Vicent Autin, de 40 años, y Bruno Boileau, de 30, pasará a la historia por ser el primero entre una pareja francesa del mismo sexo tras la larga y polémica tramitación de una ley que ha levantado ampollas entre la sociedad de un Estado laico pero con profundas convicciones católicas.

Con la prohibición expresa de cualquier concentración en la calle, las inmediaciones del Ayuntamiento de Montpellier, donde se celebrará el enlace, se mantienen en orden sin ningún signo evidente de que vayan a reproducirse los graves incidentes provocados por la extrema derecha en la manifestación del pasado domingo en París contra la ley promulgada por los socialistas franceses.

Más de 600 invitados y más de 130 medios

La alcaldesa socialista de Montpellier, Hélène Mandroux, será la encargada de oficiar la ceremonia civil que ha levantado una importante expectación mediática con más de 130 medios de comunicación acreditados procedentes de todo el mundo. Ante la evidente falta de espacio en la tradicional sala de matrimonios, el Ayuntamiento ha habilitado la generosa sala de Rancontres que también amenaza con quedarse pequeña ante la afluencia prevista de más cerca de 600 personas.

Vicent Autin, de 40 años, es diplomado en la Escuela de Comercio, trabaja en la oficina de turismo de Montpellier y preside la asociación Orgullo Lésbico y Gay de la localidad francesa, caracterizada por su aperturismo para con la homosexualidad. Bruno Boileau, de 30 años, es funcionario público. Son pareja desde hace siete años.