El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó hoy que la expulsión de la agencia de cooperación estadounidense Usaid por supuestas actividades de conspiración continua en proceso, tras haber sido anunciada el 1 de mayo pasado.

"Reiterar que ya está decidido que se va Usaid", sostuvo Morales en una rueda de prensa, al ser consultado sobre el avance de esa determinación, de la que no se volvió a hablar en el último tiempo.

El gobernante afirmó además que las instituciones del Gobierno de Estados Unidos tienen "como misión conspirar" contra presidentes "antiimperialistas" en cualquier parte del mundo.

Según Morales, los funcionarios de Usaid al retirarse de los proyectos que tiene en Bolivia afirman a los beneficiarios que los mismos no serán concluidos por culpa de la decisión tomada por el mandatario, aunque ya contaban con presupuestos.

"Vamos a terminar (los proyectos) con nuestra plata (nuestro dinero), dignamente. Y se va ir a Usaid, estamos en ese proceso", manifestó el mandatario al sostener que ya se le "acabó la paciencia" con la institución.

En su momento, la agencia de cooperación rechazó de plano las denuncias del mandatario y destacó que su labor en el país andino durante 50 años demandó una inversión de 2.000 millones de dólares en sus diversos proyectos sociales y productivos.

Morales ya expulsó en 2008 al entonces embajador estadounidense Philip Goldberg y a la agencia antinarcóticos de ese país (DEA, por sus siglas en inglés), acusándoles también de conspiración, lo que Washington ha negado.

Hace unos días también aseguró que no le "temblaría la mano" para cerrar la embajada de Estados Unidos, país al que responsabiliza del bloqueo aéreo sufrido por su avión en Europa hace dos semanas.