El expresidente egipcio Hosni Mubarak llegó hoy a la Academia de Policía, en las afueras de El Cairo, para asistir al comienzo de la repetición de su juicio por la muerte de manifestantes en la revolución de 2011.

La televisión egipcia informó de que un helicóptero trasladó a Mubarak desde el hospital militar de Maadi en el que se encontraba hasta la academia policial, donde hay desplegadas fuertes medidas de seguridad y decenas de simpatizantes y detractores del exmandatario se han congregado.

En medio de un tenso ambiente, los primeros mostraron fotografías de Mubarak y entonaron lemas a favor del acusado, mientras los segundos llevaron fotos de los fallecidos durante la revolución que desbancó del poder al expresidente.

Según las imágenes difundidas por televisión, Mubarak entró en el tribunal tumbado en una camilla, al igual que hiciera en sus comparecencias en el anterior proceso.

De 84 años, el que fuera presidente egipcio durante tres décadas se encontraba en un hospital militar como consecuencia de las heridas sufridas al caerse del baño en diciembre pasado en la prisión de Tora, donde cumplía una sentencia a cadena perpetua por la muerte de manifestantes.

Un tribunal de apelación ordenó en enero pasado anular su condena y repetir el proceso contra este, contra el exministro de Interior Habib al Adli -también condenado a cadena perpetua en su primera sentencia- y seis ayudantes del ministro que habían sido absueltos.

La corte admitió los recursos presentados por la defensa, para la que el histórico fallo del 2 de junio de 2012 no contaba con pruebas suficientes, y los de la Fiscalía, que exigía la pena de muerte para los inculpados por la muerte de manifestaciones.

Asimismo, se repetirá el juicio contra Mubarak, sus dos hijos, Alaa y Gamal, y el empresario Husein Salem -detenido en España- por delitos de enriquecimiento ilícito y por favorecer la exportación de gas a Israel a precios bajo el valor de mercado.