El exvicepresidente egipcio Omar Suleimán negó categóricamente que el exjefe de Estado Hosni Mubarak diera orden de disparar contra los manifestantes durante la revolución, en el testimonio que prestó ayer en el juicio contra el exgobernante, reveló hoy a Efe un abogado de la acusación.

Según el letrado, que pidió el anonimato, Suleimán declaró que Mubarak nunca dio orden de disparar, aunque sabía que hubo muertos en los choques contra las fuerzas del Ministerio del Interior, ya que él mismo le pasó informes con el registro de los fallecidos y sobre los acontecimientos acaecidos durante la revuelta.

Suleimán, que fue jefe de la Inteligencia egipcia antes de ser nombrado en enero pasado vicepresidente, aseguró que Mubarak sabía los nombres de todas las personas que perdieron la vida. A juicio del abogado, la declaración de Suleimán, que se llevó a cabo a puerta cerrada, fue a favor del exgobernante, salvo cuando dijo que los manifestantes fallecieron en choques en el Ministerio del Interior. El letrado hizo estas revelaciones pese a que el tribunal ha prohibido que se hagan públicas las declaraciones de los testigos, aunque ya han sido filtradas en algunos diarios egipcios.

Por otro lado, hoy testificó ante la corte penal el ministro del Interior, Mansur Esaui, que lo hizo durante dos horas ante la presencia de Mubarak, señaló a Efe el abogado de la acusación Asad Haikal, que no dio más detalles. El pasado día 11, estaba citado para testificar el jefe de la junta militar, mariscal Husein Tantaui, quien no se presentó a la sesión, que fue aplazada hasta el próximo 24 de septiembre.

La ley egipcia no obliga a los militares a comparecer como testigos antes tribunales civiles. Mubarak, sus dos vástagos, Alaa y Gamal, el exministro del Interior Habib al Adli y seis de sus asesores están acusados de estar implicados en los ataques contra manifestantes en las protestas que precedieron a la caída del antiguo régimen el pasado 11 de febrero.