Otra muerte misteriosa de un ruso en Gran Bretaña. En el 2005 fue el exagente del KGB Alexander Litvinenko que murió envenenado con una alta dosis de polonio-210. Ayer llegó la hora del personaje a quien Litvinenko iba a matar en 1998 siguiendo las órdenes de sus jefes. La bestia negra del Kremlin, el magnate ruso Boris Berezovski, exiliado en Gran Bretaña, fue encontrado muerto en su casa de Surrey. Tenía 67 años.
Berezovski fue uno de los oligarcas más influyentes en la época del presidente ruso Boris Yeltsin. El millonario estuvo detrás de la llegada al poder en el 1999 del exagente de los servicios secretos Vladimir Putin. El magnate llegó a ser propietario del 49% de las acciones de la televisión ORT, la cadena rusa de mayor audiencia rusa, y fue elegido miembro de la Duma (Cámara baja). Pero en 2001 cayó en desgracia tras intentar controlar al nuevo presidente Putin. Acabó huyendo de Rusia y en 2003 el Gobierno británico le concedió asilo político. Desde entonces ha sido un acérrimo oponente del Kremlin.
El magnate había tenido un enfrentamiento empresarial con el dueño del club inglés Chelsea, el también ruso Roman Abramovich. El año pasado, Berezovsky, de 67 años y que iba a todas partes con guardaespaldas, había perdido una batalla legal de unos 3.750 millones de euros contra Abramovich por considerar que éste le había intimidado para vender acciones en la petrolera rusa Sibneft por una "fracción" de su valor real. Sin embargo, las acusaciones del oligarca ruso fueron rechazadas por el Tribunal comercial de Londres. Tanto Berezovsky como Abramóvich consiguieron amasar cuantiosas fortunas en la Rusia de Borís Yeltsin.
Enemigo de Putin
En más de una ocasión había declaró que estaba preparando un “golpe” para derrocar el régimen autoritario en Rusia. Llegó a ofrecer recompensa a aquellos que “detengan al peligroso criminal Putin”. En varias ocasiones, Moscú solicitó a Londres, sin éxito, su extradición al acusarle de haber realizado un llamamiento a llevar a cabo un golpe de Estado. Además, Berezovski era objeto de numerosas investigaciones en Rusia por fraude.
Nada más conocerse la muerte de Berzovski, el portavoz de Putin Dmitri Peskov declaró que “hace un par de meses el multimillonario pidió perdón” al presidente y le pidió permiso para regresar a Rusia. “Envió una carta personal a Vladimir Putin, reconociendo que había cometido muchos errores y pidiéndole perdón”, declaró Peskov al canal ruso 24 horas.
La televisión rusa alegó que Berezovski ha muerto a causa de problemas cardiacos. Mientras, uno de los abogados de Berezovski alegó en su cuenta de Facebook que el magnate se había suicidado bajo presión de los problemas económicos. “Últimamente se encontraba en un estado horrible por sus numerosas deudas. Estaba prácticamente arruinado, vendía su colección de cuadros”, escribió el abogado Alexander Dobrovinski.
