Al menos 122 personas murieron ayer y más de 50 resultaron heridas al estrellarse un avión ruso en el aeropuerto de Irkutsk, en Siberia. El Airbus A-310 de las líneas aéreas Sibir, procedente de Moscú, se salió de la pista por razones desconocidas a las 02:44 hora de Moscú (poco antes de la una de la madrugada, hora española), pocos segundos después de aterrizar. El aparato atravesó la zona de seguridad de la pista, perforó el muro de contención del aeropuerto y chocó contra un conjunto de garajes privados.

14 NIÑOS FALLECIDOS El choque destruyó la cabina y provocó una explosión y un incendio. A bordo del avión viajaban 200 personas, entre pasajeros y tripulación, entre ellos 14 niños que iban a pasar sus vacaciones al lago Baikal, un popular destino de verano en Siberia. A bordo también iban 12 extranjeros.

Los bomberos tardaron más de dos horas en apagar el incendio. Según el Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso, los equipos de rescate recuperaron 122 cadáveres. Un total de 53 personas sobrevivieron. Veinticinco pasajeros figuran en la lista de desaparecidos. Solo 11 supervivientes, entre ellos una azafata y un piloto, pudieron huir por la salida de emergencia.

Entre los pasajeros extranjeros había "tres ciudadanos alemanes, tres chinos, dos polacos, dos azerbaiyanos y dos bielorrusos. Los dos polacos, los dos bielorrusos, un alemán y un azerbaiyano resultaron heridos", dijo Sibir.

FALLO DE LOS FRENOS Según la Fiscalía General rusa, la causa del siniestro fue el mal estado del avión. Los fiscales abrieron una investigación y no descartan un error humano. Algunas fuentes apuntaron a un fallo en el sistema hidráulico de los frenos.

El vuelo 778, procedente del aeropuerto moscovita de Domodedovo, aterrizó en Irkutsk bajo una intensa lluvia. El ministro de Transporte ruso, Igor Levitin, informó de que "la pista estaba cubierta de agua".

"Los pilotos del avión habían dicho a los controladores que habían aterrizado con éxito, pero el contacto por radio se perdió de repente", afirmó el responsable.

Levitin destacó que, aunque la ley exige una zona de contención de 200 metros de largo en las pistas, el aeropuerto de Irkutsk tiene una zona de seguridad de solo 50 metros a "campo través". Los testigos contaron que el aparato aterrizó con normalidad, pero en vez de frenar aceleró. "Pensé que íbamos a despegar de nuevo", dijo un pasajero a la televisión rusa.

La compañía Airbus envió un equipo de expertos a Rusia para participar en la investigación. El avión accidentado, ensamblado en 1987, había realizado más de 10.000 vuelos. Su última revisión tuvo lugar en julio del 2005. La caja negra del aparato será trasladada a Moscú para ser descifrada. La compañía Sibir, la segunda aerolínea de Rusia tras Aeroflot, posee 10 Airbus en su flotilla de aviones y comenzó a volar entre Moscú e Irkutsk en julio del 2004.

CONDOLENCIAS El presidente ruso, Vladimir Putin, expresó ayer sus condolencias a los familiares de las víctimas. "Manifestando el dolor por las víctimas y transmitiendo las condolencias a sus parientes y allegados, declaró el 10 de julio del 2006 como día de luto en la Federación Rusa y que las banderas estatales ondeen a media asta", reza un decreto presidencial.