Quince insurgentes y un soldado murieron hoy a causa de los intensos combates que desde hace días tienen lugar en el remoto valle de Tirah, en el noroeste de Pakistán, informaron a Efe fuentes oficiales.

Los choques se están desarrollando en la zona de Jarobi, donde los militares y miembros de grupos insurgentes pugnan por el control del valle, según un funcionario local de la zona tribal de Khyber, Razá Khan.

Una fuente militar confirmó a Efe los detalles del incidente ocurrido hoy.

Las escaramuzas se desencadenaron a finales de la semana pasada a raíz de una ofensiva del Ejército contra los dos principales grupos insurgentes activos en la zona, que hasta ahora estaban enfrentados pero que han creado una alianza para enfrentarse al Ejército.

De acuerdo con las informaciones oficiales, desde el pasado viernes han muerto más de un centenar de insurgentes y más de una veintena de soldados, aunque los números son muy difíciles de contrastar por la ausencia de fuentes independientes.

Aunque hace más de dos años que el Ejército y los integristas combaten por el control de un enclave considerado de gran valor estratégico, los choques han adquirido mayor virulencia desde el pasado diciembre.

Desde entonces se han registrado, siempre según el recuento de las autoridades paquistaníes, cerca de 300 muertos, en su mayoría miembros de la insurgencia.

Los milicianos del principal grupo talibán, TTP, y de otra facción integrista, Lashkar e Islam (LI), llevaban meses pugnando entre ellos por el control del valle, pero esta semana medios locales informaron de que se han aliado contra el enemigo común.

El principal interés del remoto valle de Tirah es que sirve de acceso tanto a Afganistán como a áreas tribales vecinas, entre ellas Waziristán del Sur y del Norte, que albergan importantes bastiones desde los que la insurgencia opera a ambos lados de la frontera.

Algunos analistas locales afirman que la inminente retirada de las fuerzas de la OTAN en suelo afgano -donde ya han abandonado algunas posiciones cercanas a la frontera con Pakistán- ha dado alas a grupo yihadistas que operan en la región limítrofe.

La actual ofensiva del Ejército paquistaní y la escalada de las hostilidades ha acentuado la huida de civiles de la zona por miedo a quedar atrapados en el fuego cruzado.

De acuerdo con fuentes gubernamentales citadas hoy por el diario Express Tribune, cerca de 50.000 han salido recientemente del valle de Tirah y afrontan una situación muy incierta a causa de su falta de recursos.