Un palestino ha muerto y seis israelís han resultado heridos, uno de ellos de gravedad, en la continuación este viernes de la ola de violencia que estalló en la región este jueves y que hasta ahora se ha cobrado las vidas de 22 personas.

El palestino es un joven del este de la ciudad de Gaza que murió como consecuencia de un incendio provocado por un bombardeo aéreo israelí esta madrugada, informan medios locales. Edham Abu Salamiye, portavoz del servicio de emergencias en la franja, ha declarado que aviones israelís han bombardeado varios objetivos y que una de las bombas ha causado un incendio en el que además de la víctima mortal han resultado heridas más de una decena de personas.

Portavoces militares han confirmado los ataques contra "blancos terroristas" en la franja en respuesta a los atentados de este jueves en una carretera del sur de Israel y "de acuerdo a la política del Gobierno". Entre los blancos atacados, según fuentes palestinas, hay también varias instalaciones del movimiento islamista Hamás en el norte y sur de la franja.

Asimismo, seis israelís han resultado heridos, uno de ellos de gravedad, como consecuencia de un cohete Grad disparado desde la franja. Impacto de cohetes Un comunicado militar informa de que dos cohetes de medio alcance han impactado en la ciudad portuaria de Ashdod, a unos 35 kilómetros de la franja, donde han causado daños a una sinagoga y una escuela religiosa.

Los seis heridos se encontraban en el comedor del seminario religioso cuando el proyectil impactó en el patio. Según la nota de prensa, milicias palestinas han disparado en las últimas horas al menos una decena de cohetes contra distintos blancos en el sur de Israel.

La espiral de violencia en la zona comenzó este jueves por la mañana con una cadena de atentados en una carretera del sur de Israel en la que murieron 8 israelís y más de 30 resultaron heridos. Siete de los atacantes fueron abatidos por fuerzas de seguridad israelíes y egipcias, informan medios locales.

Por la tarde, cinco milicianos palestinos de los Comités Populares de Resistencia y el hijo de dos años de uno de ellos murieron en un bombardeo de represalia israelí en la localidad de Rafá. En total 22 personas, entre israelís y palestinos, han muerto desde el jueves en la peor ola de violencia en la región desde la operación Plomo Fundido en Gaza hace más de dos años.