AL MENOS una niña de 2 años murió anoche en la ciudad turca de Konya al desplomarse, por causas desconocidas, un edificio de 11 plantas. Los servicios de rescate temían que el número de víctimas pudiera ser mucho mayor, ya que se calcula que había más de un centenar de personas en su interior. Una docena de personas pudieron salir con vida de entre los cascotes, según aseguró una televisión local mientras mostraba las primeras imágenes del inmueble, que tenía 38 apartamentos.