Era la primera vez en la historia de Nápoles. Unas 150.000 personas procedentes de toda Italia y de 30 países distintos se manifestaron ayer por las calles de la capital napolitana contra todas las mafias del país, recordando a las casi 900 víctimas del crimen organizado, cuyos nombres fueron pronunciados por distintas personalidades como una especie de lúgubre letanía.

Por sorpresa, al final de la manifestación se presentó el escritor Roberto Saviano, autor del libro sobre la Mafia napolitana Gomorra , que leyó los nombres de los seis inmigrantes de Ghana asesinados por un comando de la Camorra el pasado septiembre en Castelvolturno. Amenazado por la Mafia, el escritor italiano vive en la clandestinidad.

JOVENES Y MAGISTRADOS Participaron muchos jóvenes, pero también obreros, parados, curas, monjas, magistrados, ciudadanos de todo tipo, así como 480 familiares de las víctimas de las mafias, algunos de ellos muy conocidos en el país, como Rita Borsellino, hermana de Paolo, magistrado de Sicilia asesinado en 1992 poco después de Giovanni Falcone, otro magistrado de Palermo víctima de Cosa Nostra.

Entre los manifestantes estaba Nando dalla Chiesa, hijo del general Carlo Alberto dalla Chiesa, supergobernador civil de Palermo, asesinado junto a su esposa por la Mafia siciliana en 1982, pero también centenares de esposas, hermanos e hijos de olvidados agentes de policía y de los carabineros muertos a lo largo de la península desde el final de la segunda guerra mundial. Como Alessandra, hija de Silvia Ruotolo, su madre y víctima inocente de un ajuste de cuentas entre camorristas en Nápoles, que salvó a su hija de cinco años cubriéndola con su cuerpo.

La manifestación de ayer ha sido el acto más llamativo de la 14 jornada contra las mafias, organizada por la asociación Libera, fundada años atrás por Luigi Ciotti, un cura que ha puesto en pie la mayor cantidad de iniciativas del país contra el crimen organizado. El portal de internet de Libera ofrece el mayor banco de datos sobre las mafias a disposición del público.

LA RECLAMACION "Hemos venido aquí para repetir que son necesarias menos palabras y más hechos", dijo Ciotti. Entre los participantes estaban también los jóvenes de la asociación Y Ahora Matadnos a Todos, de la región de Calabria, que denunciaron que "las leyes contra la Mafia han sido pocas y demasiado débiles".

La manifestación, de dos kilómetros y medio de largo, recorrió las calles más céntricas de Nápoles, siendo la primera vez que la ciudad se convertía en escenario de una protesta de tanta envergadura contra las mafias.

Rosa Russo Jervolino, alcaldesa de la ciudad, pidió: "Nápoles puede expresar todas sus energías, libre de intereses criminales, porque el gobierno de la ciudad tiene que estar en manos de los napolitanos". "La Camorra y las mafias no son invencibles, no son eternas", subrayó Antonio Bassolino, presidente de la región de Campania.