Dunkin Donuts no contaba con el histórico líder palestino Yasir Arafat. O, para ser más exactos, Dunkin Donuts no contaba con los estereotipos y los prejuicios de muchos que consideran que Arafat fue poco más que la personificación del mal, del terrorismo asesino. El caso es que la famosa empresa de donuts ha tenido que retirar en EEUU una publicidad en la que se ve a Rachael Ray (conocida por sus programas de libros y cocinas) anunciando café helado mientras luce alrededor del cuello un pañuelo similar a la kufiya como la que Arafat convirtió en símbolo de la lucha palestina.

El anuncio se hizo público el 7 de mayo. Dos semanas después, el blog conservador Little Green Footballs acusó a Dunkin Donuts y a Ray de "promocionar el símbolo del terrorismo palestino y la intifada". A partir de aquí, el asunto se disparó. Bloggers conservadores acusaron a la empresa de promover la "chic jihad", (presentar como elegante la lucha palestina). Hubo vídeos en YouTube, blogs de toda índole y, al final, la retirada del espot.

Antes de ceder a las presiones, el argumento que utilizó Dunkin Donuts es que la decisión de utilizar el pañuelo se tomó por motivos puramente estéticos. En EEUU, la kufiya se ha convertido en un accesorio de moda relativamente popular en según qué ambientes urbanos, que ha llegado a verse en el cuello de famosas como Cameron Diaz y cuyo uso se recomienda en numerosas webs y blogs de tendencias. Es un fenómeno que también se ha dado en otros accesorios de moda (como la parafernalia militar o la famosa fotografía del Che) que en ocasiones se lucen sin atender (o conocer) simbolismos ni orígenes.