LUGAR DE NACIMIENTO HAIFA

EDAD 54 AÑOS

PROFESION INGENIERO INDUSTRIAL

DOMICILIO VIVE EN LA GALILEA

TRABAJO REGENTA UN ´BED AND BREAKFAST´ EN LA LOCALIDAD DE MITZPE HILA, CERCA DE LA FRONTERA CON EL LIBANO

NACIONALIDAD ISRAEL Y FRANCIA

El sábado que viene se cumplirán mil días de la captura del soldado israelí Gilad Shalit, llevada a cabo por tres milicias palestinas cerca de Gaza. La prensa asegura que las posturas entre Israel y Hamás para cerrar el canje de prisioneros están más cerca que nunca, pero el acuerdo no llega. Desde hace una semana, el padre de Gilad, Noam Shalit, acampa frente a la residencia del primer ministro, Ehud Olmert, para presionar al Gobierno y recordarle que el tiempo va en contra de su hijo.

--Esta semana usted se reunió con la mujer del primer ministro, Aliza Olmert. ¿Qué le dijo?--Nos mostró su simpatía y su solidaridad y nos aseguró que se están haciendo esfuerzos para liberar a Gilad, aunque no nos dio ninguna noticia concreta.

--¿Cree que el Gobierno está haciendo lo suficiente?--No. Solo puedo juzgarlo en términos de resultados y desafortunadamente no han logrado nada. Han fracasado durante casi mil días. Quizás cuando Gilad retorne se debería abrir una comisión de investigación para averiguar por qué se ha tardado tanto en devolverle a casa.

--¿Qué les dice a los padres que se han manifestado contra el canje de prisioneros?--Eran tres padres de víctimas del terrorismo del 2002. No tenemos ningún interés en discutir con ellos. Nosotros también somos víctimas, conocemos su dolor. Sabemos que la liberación de Gilad implica un dilema muy complejo, pero esta misma semana otras familias nos han expresado su respaldo a la excarcelación de aquellos que mataron a los suyos. El colectivo está dividido; como ve, unos nos apoyan y otros no.

-- ¿Qué está siendo lo más duro para su familia en lo personal?--La incertidumbre y que haya pasado tanto tiempo sin noticias o progresos. Hamás no tiene prisa. Han convertido al millón y medio de civiles de Gaza en rehenes. Ellos están pagando la situación de mi hijo desde su secuestro en junio del 2006. Viven sitiados, hambrientos y en medio de una terrible pobreza. Y todo porque Hamás no cede. Israel está dispuesto a liberar a cientos de presos, pero ellos insisten en recuperar a sus políticos y activistas.

--¿Cómo cree que su hijo puede estar llevando el cautiverio?--No podemos saberlo. Era muy joven cuando se alistó en el servicio militar al acabar el bachillerato; tenía menos de 20 años. Sirvió en el Ejército solo 11 meses. No estaba preparado para esto. Quién sabe cómo estará, Hamás no ha permitido ningún contacto con él durante todo este tiempo. No tenemos ninguna pista sobre cómo esta sobreviviendo a esta pesadilla.

--¿Cree que con el nuevo Gobierno en Israel será más complicada su liberación?--Sin duda. Por eso nos hemos trasladado frente a la residencia del primer ministro. Le recomendamos a Hamás que acepte el acuerdo porque no podrá mejorarlo con el Gobierno de Netanyahu y Lieberman. Al contrario, endurecerán el bloqueo. Es la última oportunidad para Hamás. Si el canje se materializa, Israel abrirá las fronteras permitiendo la entrada de algunos bienes y quizás autorizará la reconstrucción de Gaza.

--¿Y qué hay del tiempo para su hijo?--También se agota.