Los brasileños han depositado en Lula más esperanzas en el inicio de su mandato que en anteriores presidentes. Según un sondeo publicado por el diario Folha de Sao Paulo , el 76% de los encuestados cree que el Gobierno será bueno o muy bueno, el 16% piensa que será medianamente bueno y sólo el 3% apuesta por una mala gestión.