Barack Obama sigue ofreciendo mensajes para tranquilizar a mercados y ciudadanos, para mostrarles que está preparado y con una batería de ideas lista para sacar a EEUU de la recesión desde el mismo momento (el 20 de enero) en que deje de ser presidente electo y se convierta en el nuevo inquilino de la Casa Blanca. En un discurso radiofónico, Obama anunció ayer un ambicioso plan para combatir el paro que incluye lo que calificó como "la mayor inversión en infraestructuras" desde la década de los 50 y la instalación de la banda ancha de conexión a internet en todo el país.

La filosofía que hay detrás de las propuestas es la misma que sustenta el plan de Gobierno de Obama: aprovechar la crisis para combinar medidas a corto y largo plazo. Es decir, embarcar al Estado en un programa de inversión pública a gran escala (las comparaciones con el new deal de Franklin Delano Roosevelt tras la Gran Depresión son inevitables) con el objetivo inmediato de combatir el paro (1,9 millones más de desempleados este año) y estimular la economía. Todo ello teniendo presente el largo plazo, es decir, la necesidad de que los sectores donde se invierta lleven al país a un cambio en aspectos como el energético que le permita un nuevo modelo de crecimiento económico.

ENVEJECIMIENTO La medida más espectacular de las anunciadas es la de las infraestructuras, puesto que llega en un momento en que es obvio su envejecimiento en muchas partes de EEUU. Obama planea trabajar con los estados e incentivar la competencia entre ellos, financiando los mejores proyectos, los que supongan un mayor número de puestos de trabajo, así como la rapidez de su puesta en práctica. La infraestructura virtual (las superautopistas de la información) es otra prioridad. "Es inaceptable que EEUU sea el 15º país del mundo en banda ancha. En el país que inventó internet, todos los niños deben tener la posibilidad de estar on line", dijo.

El tercer pilar es solo el principio de lo que está por venir: lo que Obama pretende que sea una revolución económica verde. El demócrata planea un "esfuerzo masivo" para que todos los edificios públicos sean más eficientes energéticamente. Eso implica reformas (por lo tanto, empleos) y también ahorro, ya que la factura energética de las instituciones públicas es "la mayor del mundo". En el sector educativo, Obama pretende "modernizar" las escuelas, y en el sanitario, informatizar todos los hospitales y centros de salud para hacer más eficiente la gestión.

FINANCIACION Como es habitual, Obama no dio cifras ni explicó cómo financiará unos planes tan ambiciosos. Algunas fuentes demócratas en el Congreso hablaban ayer de un paquete inicial de unos 632.000 millones de euros o incluso de hasta un billón de dólares (790.000 millones de euros). Obama ya ha dicho que de entrada el déficit no será prioritario.