El presidente de EEUU, Barack Obama, anunciará esta noche el envío de más de 30.000 soldados adicionales a Afganistán que quedarán desplegados a lo largo de seis meses, un plazo sorprendentemente rápido.

Obama tiene previsto explicar hoy su esperada nueva estrategia para la guerra en la república islámica en un discurso en la prestigiosa academia militar de West Point a partir de las 20.00 horas (las 2.00, en horario peninsular español).

En declaraciones a varias cadenas de televisión, el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, ha afirmado que Obama anunciará un "envío acelerado" de refuerzos, que irá "mucho más rápido que lo previsto en el plan original".

SALIDA GRADUAL

La meta, indica Gibbs, es adiestrar a las fuerzas afganas lo más rápidamente posible para que puedan hacerse cargo de la seguridad de su país, de modo que las tropas estadounidenses puedan ir saliendo gradualmente. "Nuestro compromiso no es de duración indefinida", ha explicado.

Según han declarado altos funcionarios estadounidenses, en su discurso Obama tiene previsto exponer un calendario a grandes trazos para la salida de las tropas estadounidenses.

Los soldados adicionales comenzarán a desplegarse en el sur y el este de Afganistán, donde la insurgencia talibán se ha mostrado más activa hasta el momento.

MINAR LA CAPACIDAD MILITAR

La idea es minar la capacidad militar de los talibanes de modo que las fuerzas afganas puedan hacerles frente por sí solas, explican las fuentes. Los 30.000 soldados se sumarán a los 68.000 militares estadounidenses que ya se encuentran en Afganistán. En total, la fuerza internacional allí desplegada cuenta con cerca de 100.000 efectivos.

Cuando Obama llegó a la Casa Blanca el pasado enero, el contingente estadounidense estaba compuesto por cerca de 35.000 soldados. El nuevo contingente se desplegará en un plazo sorprendentemente rápido, apenas seis meses, en una operación que se completará para el próximo verano.