El candidato electo, que se ha tomado libre el fin de semana para pasarlo descansando con su familia en Illinois tras la victoria electoral del martes pasado, ha agradecido en su discurso la participación ciudadana en los comicios.

Obama ha señalado que ahora hay que olvidar las diferencias entre demócratas y republicanos y comenzar a trabajar juntos "en un momento con los mayores desafíos de nuestra vida", según sus palabras.

El todavía senador por Illinois ha agradecido la disposición del actual presidente, George W. Bush, para facilitar la transición al nuevo equipo de Gobierno. Bush ha prometido "plena cooperación" con Obama en su discurso radiofónico semanal, y ha afirmado que asegurarse de que la transición sea "perfecta" será una de sus prioridades durante el tiempo que siga al frente del país.

Objetivo común

"Esto habla de un reconocimiento fundamental, de que aquí en Estados Unidos podemos competir vigorosamente en las elecciones, desafiar las ideas de uno y otro, y luego somos capaces de unirnos al servicio de un objetivo común", ha subrayado Obama.

Por otra parte, Obama ha recordado a las miles de familias que se han quedado sin empleo en este último año y "están luchando para poder pagar sus facturas y conservar sus casas". Según los datos publicados el viernes por el Departamento de Trabajo, en octubre 240.000 personas perdieron su empleo, y en lo que va de año se han destruido 1,2 millones de trabajos en EEUU, lo que eleva la cifra de desempleados a cerca de 10 millones.

"Sus historias son un urgente recordatorio de que estamos ante el mayor desafío económico de nuestras vidas", por lo que ha asegurado que su gobierno actuará con rapidez para resolverlo. Obama ha reconocido que no será un trabajo fácil --"no subestimo la enormidad de la tarea que nos aguarda", ha dicho--, pero ha declarado que ya trabaja con su equipo para diseñar nuevas medidas.

Obama ha señalado que en estos meses desde que se desató la crisis, se han tomado algunas acciones importantes. "Necesitaremos hacer más durante esta transición y los meses siguientes", ha asegurado. "No podemos permitirnos el lujo de esperar a avanzar en las prioridades clave identificadas durante la campaña, incluida la energía limpia, la atención de la salud, la educación y la reducción de impuestos para familias de clase media", ha afirmado.

Plan de rescate

En primer lugar, el país necesita "un plan de rescate para la clase media" que cree puestos de trabajo y su administración analizará cómo la crisis financiera ha afectado a otros sectores de la economía.

También se evaluará el plan de rescate que aprobó el Congreso el mes pasado para asegurarse de que está dando los resultados esperados y que las empresas que están recibiendo asistencia del gobierno no se están lucrando.

Algunas de estas medidas, "serán difíciles, pero Estados Unidos es un país fuerte y resistente". "Sé que tendremos éxito si dejamos de lado el partidismo y trabajamos juntos como nación", ha dicho. La crisis formará parte de la conversación que mantendrá con George W. Bush, el próximo lunes en la Casa Blanca, donde ambos abordarán las cuestiones más acuciantes para el país.