El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pidió hoy el inicio de "una nueva era de responsabilidad" de los estadounidenses en sus vidas y para su país en el mundo, como fuerza de cooperación y diálogo.

En su discurso tras la jura como presidente de Estados Unidos, Obama apeló a los valores fundamentales de su país para comenzar un nuevo capítulo en su historia.

"Nuestra economía está muy debilitada, como consecuencia de la avaricia y la irresponsabilidad por parte de algunos, pero también por el fracaso colectivo en tomar las decisiones difíciles y preparar a la nación para una nueva era", dijo Obama ante un mar de personas que ocupaba unos cinco kilómetros en el centro de Washington.

Ante esos errores, Obama instó a los estadounidenses a retomar las "verdades" que han hecho a Estados Unidos la nación que es: el trabajo duro, la honestidad, el valor, la justicia, la tolerancia y el patriotismo.

"Lo que se nos pide ahora es una nueva era de responsabilidad, el reconocimiento, por parte de cada estadounidense de que tenemos obligaciones hacia nosotros mismos, nuestra nación y el mundo", dijo Obama.

En el terreno internacional, el nuevo presidente estadounidense quiso marcar un cambio con respecto a la administración de su antecesor, George W. Bush.

"A todos los pueblos y gobiernos que nos están viendo hoy, desde las mayores capitales al pequeño pueblo donde nació mi padre: Sabed que Estados Unidos es un amigo de cada nación y cada hombre, mujer y niño que busca un futuro de paz y dignidad, y que estamos listos para ser líderes una vez más", afirmó Obama, cuyo padre era de Kenia.

El mandatario recordó que Estados Unidos derrotó al fascismo y al comunismo "con alianzas sólidas y convicciones duraderas". "Nuestro poder sólo no nos puede proteger, ni nos da derecho a hacer lo que nos plazca", afirmó.

Obama señaló que los desafíos actuales requieren que Estados Unidos haga un esfuerzo mayor para promover la cooperación y el entendimiento entre las naciones, en la amenaza nuclear y el calentamiento global.

El presidente ofreció "un nuevo camino hacia adelante" al mundo musulmán. "A los que se aferran al poder mediante la corrupción y el engaño y silenciando la disensión, sabed que estáis en el lado equivocado de la historia, pero que os tenderemos la mano si estáis dispuestos a abrir el puño", dijo Obama, en una referencia a los regímenes autoritarios de Oriente Medio.