CIUDAD VENERADA
Kerbala, por su condición de ciudad venerada por los chiís y lugar de peregrinación, es un objetivo habitual de los ataques de los extremistas sunís en la ola de violencia sectaria que devora Irak.
PEREGRINOS
De la tragedia más reciente hacía poco más de un mes. El pasado 6 de marzo, al menos 118 peregrinos murieron en su ruta a pie hacia la ciudad sagrada para conmemorar el Arbain, una festividad que marca el fin de 40 días de duelo. El peor de los ataques, en Hilla, mató a 90 personas.
ADOLESCENTE SUICIDA
El 5 de enero del 2006, un joven se mezcló con los peregrinos e hizo estallar los 8 kilos de TNT que llevaba pegados al cuerpo. Murieron al menos 49 personas.
EN CADENA
El 2 de marzo del 2004, los chiís de Irak celebraban por primera vez en libertad, tras 35 años, la ashura. Nueve explosiones casi simultáneas causaron al menos 112 muertos en Kerbala y más de 70 en Bagdad, y generaron una histeria antisuní que acabó, tras la voladura del santuario de Samarra (2006), en una ola de venganzas.
TAMBIEN EN NAYAF
En la otra ciudad santa chií, un coche bomba estalló junto al mausoleo del imán Alí, el 29 de agosto del 2003. Murieron unas 83 personas, entre ellas el líder el ayatolá Hakim, líder chií.
